Ayer, después de aguantar el viento, el frío y el granizo en Santander, recibíamos una llamada de un laaaaargo y desconocido número de teléfono, detrás del cual, estaba “el señor de los iluminatis”, quien de manera muy poco clara, mostraba su interés por ir a Madrid. Como la respuesta no debió gustarle, hoy ha continuado el culebrón, con más fuerza si cabe.
La mañana de este martes, a 24 horas de la reunión en Madrid, ha sido movidita y llena de falsedades, en busca de argumentos que justifiquen su presencia en la misma, cuando hasta la fecha, el único interés que habían mostrado, era para reírse de las posibilidades de esa reunión de Madrid. Hemos recibido llamadas de todo tipo, para que gestionemos su inclusión, a última hora, en la reunión. Llamadas provenientes de la Administración, de la Empresa, y alguna gestión tan rocambolesca como la de algún asesor legal de la empresa. A lo largo de la mañana, no vamos a ocultar que ha habido momentos en hemos sentido la presión. En alguna ocasión hemos dudado, y hemos temido que se pudiera poner en peligro, incluso, la propia reunión de Madrid. Cosa que no podemos permitirnos.
Qué cinismo compañeros, hay en todo esto. Nadie mostró interés cuando se suspendió la del pasado 13 de febrero, por problemas de local y de número de asistentes. No había sitio para todos, y nos la retrasaron dos semanas. En cambio ahora, en unas horas, parece que hay sitio de sobra y todo son facilidades. Sinceramente, creemos que la decisión está tomada, y esto solo es un paripé, para justificarse otras actitudes.
HACE UN MES que el comité valoró esta situación y acordó presentar a la empresa, esta posibilidad de acuerdo, pero es una alternativa que debe ser aprobada por la Administración. Para ello decidimos solicitar la reunión y viajar a Madrid. Y cuando decimos el comité, nos referimos a los miembros del mismo que continúan luchando por los puestos de trabajo, a los representantes de los trabajadores que continúan, haga frío o calor (casi siempre frío), presentando alternativas y tratando de que vuelva a ponerse en marcha la fábrica. Los otros, a los que nunca echamos, como van diciendo por ahí, porque se fueron ellos solitos (insultando además al resto), diciendo que podíamos quedarnos como “un grupo de amigos”, continúan engañando a todo el que les quiere oír. ¿Han hecho algún intento por volver a defender a los trabajadores? Todo lo contrario, nunca han querido participar: no quisieron ir con nosotros a solicitar la presencia de los trabajadores en el Concurso Mercantil, y se lo solicitamos; se negaron a firmar el documento por el que aceptábamos presentarnos en el juicio de la Audiencia Nacional, y se lo ofrecimos, no han querido, tantas y tantas veces, mezclarse con la plebe. Pero andan por ahí con sus sonrisas de hiena y sus lágrimas de cocodrilo, diciendo que les excluimos.
Pero ay amigo, ahora deciden o ¿les habrán mandado? que les interesa estar presentes, y no tienen el menor reparo en recurrir a cualquier medio para conseguir lo que pretenden. No dudan en recurrir a quien sea, para que nos presionen. No sabemos quién está detrás de todo esto, pero está claro que alguien vela por los intereses de estos “iluminatis”, puede que sea tan impresentable como ellos.
Y de la empresa qué, desde la última vez que nos vimos, tres veces hemos ido a preguntar por la reunión, que ellos mismos comprometieron, antes de viajar a la Dirección General de Empleo, tres veces nos dijeron que “estaban muy liados”. Hoy nos vienen con que quieren vernos antes de entrar. ¡País!
Qué cinismo compañeros, hay en todo esto. Nadie mostró interés cuando se suspendió la del pasado 13 de febrero, por problemas de local y de número de asistentes. No había sitio para todos, y nos la retrasaron dos semanas. En cambio ahora, en unas horas, parece que hay sitio de sobra y todo son facilidades. Sinceramente, creemos que la decisión está tomada, y esto solo es un paripé, para justificarse otras actitudes.
HACE UN MES que el comité valoró esta situación y acordó presentar a la empresa, esta posibilidad de acuerdo, pero es una alternativa que debe ser aprobada por la Administración. Para ello decidimos solicitar la reunión y viajar a Madrid. Y cuando decimos el comité, nos referimos a los miembros del mismo que continúan luchando por los puestos de trabajo, a los representantes de los trabajadores que continúan, haga frío o calor (casi siempre frío), presentando alternativas y tratando de que vuelva a ponerse en marcha la fábrica. Los otros, a los que nunca echamos, como van diciendo por ahí, porque se fueron ellos solitos (insultando además al resto), diciendo que podíamos quedarnos como “un grupo de amigos”, continúan engañando a todo el que les quiere oír. ¿Han hecho algún intento por volver a defender a los trabajadores? Todo lo contrario, nunca han querido participar: no quisieron ir con nosotros a solicitar la presencia de los trabajadores en el Concurso Mercantil, y se lo solicitamos; se negaron a firmar el documento por el que aceptábamos presentarnos en el juicio de la Audiencia Nacional, y se lo ofrecimos, no han querido, tantas y tantas veces, mezclarse con la plebe. Pero andan por ahí con sus sonrisas de hiena y sus lágrimas de cocodrilo, diciendo que les excluimos.
Pero ay amigo, ahora deciden o ¿les habrán mandado? que les interesa estar presentes, y no tienen el menor reparo en recurrir a cualquier medio para conseguir lo que pretenden. No dudan en recurrir a quien sea, para que nos presionen. No sabemos quién está detrás de todo esto, pero está claro que alguien vela por los intereses de estos “iluminatis”, puede que sea tan impresentable como ellos.
Y de la empresa qué, desde la última vez que nos vimos, tres veces hemos ido a preguntar por la reunión, que ellos mismos comprometieron, antes de viajar a la Dirección General de Empleo, tres veces nos dijeron que “estaban muy liados”. Hoy nos vienen con que quieren vernos antes de entrar. ¡País!